Rose y Cayo esperan con emoción la llegada de su bebé. Para celebrarlo, remodelamos su cuarto de visitas para darle la bienvenida al nuevo integrante de la familia. El espacio debía ser neutral, cálido y lleno de magia, listo para crecer con él o ella y acompañar a los papás en esta nueva etapa.

El cuarto combina comodidad, practicidad y calidez, con detalles en madera que aportan serenidad y armonía visual. Cada elemento fue cuidadosamente seleccionado: el rodapié con moldura divide el tapiz superior del color liso, mientras que la mecedora con taburete y mesa lateral ofrece un lugar perfecto para las horas de arrullo.

La iluminación se resolvió con lámpara de pie y lámpara de pared sobre el cambiador, asegurando que cada momento de cuidado del bebé sea cómodo y agradable.

Los detalles decorativos aportan personalidad y encanto: globos tejidos de Zara Home que llenan de magia una esquina, cuadros realizados con telas recicladas sobre la cuna, y un tapete amplio en el centro con gimnasio infantil, listo para jugar y explorar.